e traemos una curiosa historia que sucedió recientemente en el metro de Nueva York: como en el de tantas otras ciudades, además de músicos con más o menos talento, los usuarios de esta transporte tienen que soportar a veces los discursos gritados de predicadores, (algunos casi tan gritados como Katy Perry cantando 'Firework' mientras Adele le pisa los dedos pequeños de los pies). En este caso, el del vídeo que podrás ver más abajo está bastante chiflado, y como es habitual, casi todo el mundo le ignora rezando a su dios para que se baje en la próxima parada.
Todo el mundo, excepto una persona que se siente ofendido por su comentarios homófobos entre los que dice que "Michael Jackson se murió porque era gay". Un gay muy vivo empieza a responder a los gritos del predicador antigay, y no se corta un pelo para intentar interrumpirle diciendo "Soy un hombre. Y un buen hombre. Soy un hombre gay y Jesús me ama. ¡Jesús me ama!". Las palabras que descolocaron al charlatán chiflado lograron un espontáneo aplauso de todo el vagón, como puedes ver a continuación en una escena que nos ha alegrado el día.
Lástima que no todos los que cogen el metro en la ciudad que nunca duerme sean iguales, porque justo este lunes un joven gay de 23 años y su novio fueron atacados en un vagón donde nadie se molestó en ayudarles. Una de cal y una de arena, que diría Merche. Quedémonos con el vídeo positivo:
Cromosomax
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